El amaranto es un cultivo sagrado prehispánico, se ofrendaba a Huitzilopochtli, dios azteca del Sol, y es también una ofrenda adecuada para la Diosa Artemisa y Demeter. El amaranto es maravilloso, te puede servir para muchas cosas: Alejar las energías negativas y los malos espíritus. Promover la curación física, emocional y espiritual. Potenciar el amor, la pasión y las relaciones románticas. Atraer la riqueza, la prosperidad y la abundancia. Simboliza la vida eterna y el crecimiento espiritual. Potenciar la intuición, la sabiduría y las percepciones espirituales. Facilitar el crecimiento y la transformación personales. Reforzar el vínculo con la naturaleza y los reinos espirituales. Usos: • Como sahumerio • Para preparar riegos • Sirve cuando se quiere ritualizar una vela Frasco de vidrio de 10 ml con tapón de corcho
