Desde el principio de los tiempos el fuego nos ha conectado con la Divinidad. En donde hay una vela encendida, notamos una paz difícil de explicar. Las velas son potentes ofrendas y poseen muchas propiedades. Son las receptoras y trasmisoras de nuestras peticiones, por tanto, nuestras poderosas aliadas a la hora de hacer magia. Nuestras velas ritualizadas, son el canal perfecto para tus intenciones más profundas. Encender una de estas velas o velones es invocar un momento de transformación, claridad y conexión con tu poder interior.